—¡Papá! Me diste un susto.—agarré mi pecho cuando prendí la luz y vi a Charlie, esperándome.

—¿Cómo te fue?—preguntó sentado.

Lo miré con el ceño fruncido, dejando mis cosas por algún lugar.

—Charlie si te has enterado de algo que no te gustó, dímelo. No tienes que ser como esos padres de la televisión que esperan a sus hijos así y les reclaman cosas.

—Perdón, es que...nunca había hecho esto.—parecía avergonzado.

Y tenía razón, nunca lo había hecho. Isabella nunca quiso estar con el, y seguía con su decisión.

—No te preocupes.—besé su cabeza agarrando la cerveza vacía, —Voy a mi cuarto ¡Buenas noches!

Boté la cerveza en la basura y subí las escaleras de mi casa.

—¡Buenas noches!

Entré a mi cuarto y luego vi como Charlie salió de la casa. Se iba a la suya.

Me senté en mi escritorio y empecé a a hacer la tarea.

Claro, hasta que mi celular sonó.

Llamada entrante

Aster ☀︎︎

—¡Hola!—dije contestando.

—Hola, preciosa.—contestó, —¿Estás ocupada?

—No, bueno si hacer la tarea que se entrega en dos semanas es estar ocupada, en ese caso, si.

Solo escuché su risa del otro lado de la línea.

—Entonces, no lo estás. Te quería preguntar algo.

—Dime.—jugué con el lápiz.

—¿Tienes algo que hacer mañana?

—Mañana ¿A qué hora?

—En la noche, como a las 9:00 pm.

Miré mi calendario.

Recoger a Iclyn de la casa de la vecina.

Llevar a Iclyn al veterinario.

Convencer a alguien que toque la batería para la canción.

No preocuparse por nada.

—Nop, mañana estoy libre a esa hora.

—Genial, eh ¿Quieres acompañarme a una fiesta?

—¿Qué clase de fiesta?

¿Quería ir a una de sus fiestas?

Aster parecía amigable pero recordemos como lo conocí.

—Tranquila Aly, no es una fiesta en si, solo habrá música, un par de juegos de mesa y tal vez unas cervezas. No será algo tan grande, será con algunos amigos y amigas.

—¿Seguro? Porque sé combate de cuerpo a cuerpo.—amenacé divertida.

—Seguro, y no necesitarás eso, no mañana.

—De acuerdo ¿Dónde es?

—Oh, yo paso a recogerte...si quieres.

—¿En moto? Si mi papá te ve me mata.—dije refiriéndome a Charlie.

—En auto, lo prometo.

—De acuerdo, oye me gustaría seguir hablando pero tengo que recoger a mi perrita.

—Si, no te preocupes. Buenas noches.

—Buenas noches.—colgué.

♪

—Gracias señora Brown, espero que Iclyn se haya portado bien.—agradecí agarrando a mi cachorra.

—Claro que si, Ashly. Es una gran cachorrita.—tocó la nariz de mi mascota y yo sonreí.

Sabía que podía confiar en la señora Brown para cuidar a Iclyn.

Cargué mejor a mi cocker spaniel blanca con marchitas marrones, el color resaltaba mas que nada en sus orejitas y el rededor de sus ojos.

Me acomodé la tira de la mochila y volví a la casa.

♪

El día siguiente pasó normal, lleve a Iclyn al veterinario y estuve con ella tocando mis canciones. Ya no con dolor, aunque aún así me llegaban al alma.

Ahora estaba orgullosa de mi talento al escribirlas, aunque las canciones sonaran algo inmaduras.

Mi celular sonó, el típico sonido de cuando te llega una notificación.

Mensaje nuevo:

Aster ☀︎︎:

"Hola Aly :)"

"Aún sigue en pie lo de esta noche?"

Y me mandó un sticker. Un niño con las manos entrelazadas, como si esperara algo

"Hola! Si claro, te mando mi dirección. Más te vale no venir con una moto porque si no mi casa se cierra :p"

Sonreí y le mandé mi dirección, dejé mi celular y me metí a bañar.

El agua caliente junto con las canciones hicieron que se pase el rato cantando y haciendo mi mini concierto, como si fuera famosa.

Porque eso es lo que todos hacemos, no lo puede negar nadie.

Cuando salí de la ducha, tenía una toalla enrollada en mi cabeza y otra en mi cuerpo.

Me decidí por lo primero que encontré.

Un polo con rayas negras, rojas y blancas, un pantalón negro con unas cuantas roturas, una casaca de jean celeste y unas zapatillas blancas.

Estuve grabando y acomodando el sonido de la guitarra eléctrica, lo poco que había tocado y lo que me mandó Armin.

La canción que había terminado antes de llegar a Forks estaba lista, solo faltaba acomodar el sonido y encontrar a alguien que tocara la batería.

El sonido de la guitarra eléctrica estaba listos, solo nos faltaba la batería.

Seguía acomodando y juntando el sonido mientras veía otros acordes cuando mi celular vuelve a sonar.

Mensaje nuevo:

Aster ☀︎︎:

"Hola preciosa. Ya estoy afuera, en auto como lo prometí"

Escribí algo rápido.

"Voy para allá"

Bajé las escaleras mientras guardaba mi celular en mi bolsillo, el gas pimienta en mi casaca.

No porque desconfiara de Aster, si no porque ya se me había hecho costumbre.

Lo vi acostado en una camioneta, color azul.

—Hola.—saludó.

—Hola. ¿Es tuyo?—pregunté señalando el carro.

—En realidad es de mis padres. Vivo no tan lejos de aquí. No sabía que tu casa era enorme.

—Si bueno, es prácticamente mía, mía y de mi papá se podría decir. Mi padre y madre siempre paran en el hospital, casi nunca los veo.

El me paró con la mano, —Me trabaste ¿Tienes dos padres?

—Bueno, Charlie Swan me trata como una hija desde que me conoce y yo lo considero un padre.

—¿Charlie Swan? ¿El sheriff?

—Si.

—Cool. Ven.

Ma abrió la puerta y entré.

Estuvimos hablando un rato hasta que llegamos a una casa, una casa algo grande.

—Es la casa de mi amigo, no de los que viste allá, amigos algo más decentes.—abrió la puerta y se escuchó la música.

—¡Aster! Allí estás amigo ¿Dónde te habías metido?—un chico moreno y con una cerveza en mano, abrazó al castaño.

Me tuve que agachar para que no me golpeara.

—Recogí a una amiga, Nassem.—me agarró la mano

—Ashly.—presenté y el me vio sorprendido.

—¡Aster tiene novia!—gritó como loco.

Esto se puso incómodo.

—Perdónalo, con una cerveza se nos pierde. Además ya está loco de por si.—susurró.

Llegaron tres chicos más junto a otras tres chicas, semi corriendo para ver el chisme.

—¿Aster con novia?—preguntaba asombrado uno/

—¿Quién es la desafortunada?—jugaba otro.

—Pobre chica, lo que le tocó.—decía divertida una rubia.

—Ashly no es mi novia ¿Si? Es una amiga a la que ya van a asustar.

—Lo siento, soy Zahra.—se presentó la peli negra de ojos azules grisáceos.

—Ashly, Mendoza.

—No es cierto.—empezó un chico algo impresionado, rubio con ojos marrones, —¿Eres la hija de los cirujanos Mendoza?

—Si, eso parece.—respondí moviéndome en mi lugar.

—Ya déjala, Kai. La vas a asustar.—paró una pelirroja, ojos verdes claros, —Soy Iri

—Luz y fuego. Los nombres relacionados con el fuego me encantan.—dije aceptando su mano mientras la pelirroja me sonreía.

—Soy Dhalia.—se presentó la rubia, ella tenía ojos caramelo.

—Relacionado con el otoño.

—¿Qué significa?—inquirió, curiosa.

—Flor más bella del otoño.

—En su cara, idiotas.—celebró.

—¿Y el mío?—preguntó la peli negra.

—Con el invierno. Brillante como la nieve.

—Esto de los significados se te da bien.—susurró Aster.

—Lo sé...

—Tu nombre se deletrea A s h l e y ¿No? Es que sé qué hay dos tipos de forma de escribirlos.—intervino Iri.

—No, en realidad es sin la e, es A s h l y—corregí amistosamente a la pelirroja.

—¿Y que significa?—ahora era Kai el de la pregunta.

—Quien vive en el bosque.—respondí, —Y creo que se me da bien, me encanta la naturaleza y todo de ella. Aunque a veces de miedo.

Ellos solo sonrieron.

—Dylan.—se presentó un castaño.

—Hijo del mar.—acepté el saludo.

—Kai, ¿Qué significa Kai?—preguntó el rubio.

—Mar, océano.

—¡Eres mi hijo Dy!—se empezó a "pelear" de forma amistosa con el castaño.

—Perdónalos, todos son unos idiotas.—dijo Zhara, riendo.

—¿Cuál es el significado de Nassem?

—Brisa o viento suave.

—Mejor nos lo llevamos para allá.—Iri se apresuró a sacar a Nassem del lugar, junto con Dhalia y Zhara.

—¿Cuál es el significado de Aster?

—Estrella.

♪

—¿Quién es el que toca la batería?—pregunté cuando escuché las pistas que ellos crearon.

—Es Aster.—respondió Dylan.

—¿Aster? ¿Aster toca la batería?—sonaba impresionada.

Bingo, había encontrado a mi baterista.

—Si, yo toco la toco ¿Por?—dijo llegando a mi lado.

—Ven.—agarré su mano y lo llevé mientras el se quejaba, de que recién se había sentado.

—¡Tárdense lo que quieran!—gritó Kai.

—¡Cállate!—regañó la voz de Zhara.

—¿Qué pasó?—preguntó el chico de ojos azules.

—Necesito que seas mi baterista. Necesito que me envíes un video tuyo tocando estos acordes.—mostré las notas en mi teléfono, los acordes de la batería.

—Creo que...podría hacerlos.—dijo cuando vio mejor los acordes, —¿Cantas?

—Si, también tocó el piano y algo de guitarra clásica y eléctrica. Estoy terminando una canción, mi primo me mandó los acordes de la guitarra eléctrica pero solo me falta la batería.

—¿Qué canción?

—Para mi primer ex novio. Estaba tan destrozada que le escribí tres canciones, lo sé estaba loca. Ya no me duele él, pero quería terminar esta canción.

—¿Quieres que toque la batería para la tercera canción dedicada a tu primer ex novio? Dios, Ashly. No sé si es ser coqueta o algo tóxica.—se burló.

—En mi defensa, ya no me gusta Peter. Esas canciones ya no significan mucho, quien me duele es Edward.

—¿Edward?

—Cullen.

—Ah, el Cullen. Oí que se fueron.

—Si, así es.

—¿Tenías algo con el?

Solo asentí, —Tenía.

—Perdón.—se disculpó.

—No te preocupes...entonces, ¿Lo harás?

—Claro, lo tengo listo para mañana.

—Genial.—sonreí, —¡Ay muchas gracias!

Lo abracé.

11:12 pm

Marcaba mi celular.

—Mierda, me tengo que ir.—dije algo triste.

—Si, claro. ¿Quieres que te lleve?

—Claro.

♪

Descarga de adrenalina. Eso me había hecho ver a Edward. De acuerdo, de acuerdo, pensé en motos.

Encontré unas, no pregunten donde.

Nuevo día, nueva adrenalina.

Decidí ir con Jake, a la reserva para que me ayude a reparar las motos. Además de que así lo veía un rato.

Tal vez estoy loca, pero no importa, no ahora.

Bajé de mi auto y vi a Jacob venir a mi.

—¡Ly!—gritó abrazándome y alzándome un poco, —¿Dónde rayos te has metido, loca?

—Por ahí, por allá. Por todos lados menos aquí, y tengo que cambiar eso.—reí y señalé lo que había atrás del auto, —Te traje algo.

Quité lo que cubría las dos motos, —Wow, motocicletas. No debiste.

—Las saqué del deshuesadero.—le dije haciendo una mueca.

El solo asintió.

—Creo que costará más arreglarlas que lo que valen, pero luego pensé que si tuviera un amigo mecánico que me ayudara...

—¿Me consideras el amigo mecánico?

—No solo eso, también mi mejor amigo, y el chico que toma esteroides para estar mas grande.—bromeé.

—¿Desde cuando te gustan las motocicletas?

—Desde...ahora, si desde ahora. Si Charlie pregunta, las encontramos por ahí y planeábamos arreglarlas y dejarlas.

—Okey.—rió.

—Entiendo si crees que es algo estupido y arriesgado.—sabía que por su cara, lo estaba dudando.

—Si, es completamente estupido y arriesgado.—negó unas cuantas veces, —¿Cuándo empezamos?

Eso si me sorprendió, pero sabía que podía confiar en Jake.

—Ahora, si ahora, por favor.

—De acuerdo.—quitó por completo la manta .

—¡Espera, son muy!...pesadas.

El las cargó como si fueran una simple pluma. ¿Ahora los esteroides le daban super fuerza?

—¿Cómo es que estás tan fuerte? Apenas tienes dieciséis.

—La edad es solo un número ¿Cuántos tienes tú? ¿Cuarenta?

—Gracias, a veces me siento así.

♪

Ya estábamos en su taller y sonaba una música, música de amor.

Me acerqué a la radio y la apagué.

—Buena canción.—se quejó Jake, —¿No te gusta?

—Es que ya no...escucho muchas canciones, solo las que toco.

—Okey, no más música.—sonrió.

—Creo que si vamos a hacer esto todos los días, y espero que así sea. Deberíamos encontrar tiempo para tus tareas, no quiero que mi tío Billy piense que soy una mala influencia.

—¿Tú? ¿Influenciarme?—dijo divertido, —Por favor

—Soy mayor que tú Jake, así es que yo te puedo influenciar si es que me lo propongo, sabes que logro todo lo que me dispongo a hacer.—me crucé de brazos

—No, mi tamaño y sabiduría me hacen, mayor que tú por tu falta de conocimiento.

—¡Hey! Logré convencerte de reparar dos maquinas mortales. Eso te hace joven e ingenuo.

—Okey ¿Y cómo quedamos?—se volteó a mi.

—Yo tengo treinta y cinco, y tú como treinta y dos.—reí y oí como se quejó.

—Oye Jake ¿Estás ahí?—escuché otras voces, y agarré mis cosas por si acaso.

Jacob me paró con una mano, —No, está bien, son mis amigos, no gente nueva que no conozcas.

—Hola Jake.—dijo uno.

—Hola.—respondió Jacob, —Bueno no hace falta presentarlos.

—Hola, pequeña.—molestó Embry, —A si que lo de las motos es cierto.

—Eh si, yo le enseñé todo lo que sabe, obviamente.—alardeé, divertida.

—Dime, Aby ¿Es verdad que eres su novia?—preguntó Quill.

Me sorprendió y por un momento me dejó sin habla, —No, su amiga, su mejor amiga a decir verdad.

—¡Uh! ¡Embustero!—gritó Embry con diversión .

—Esperen, no olviden que les dije que era solo mi mejor amiga.—se excusó Jake.

—Embry ¿Recuerdas que haya hecho esa distinción?—jugó Quill.

—No, para nada.

—Ustedes ya consiguieron novia, que bien ¿Cómo se siente? Genial, supongo.—defendí a mi amigo.

Los demás rieron.

—Si como no, Quill irá al baile de graduación con su prima.—se unió Jake.

—Si que gracioso eh.

♪

Los días con Jake arreglando motocicletas pasaron rápido, Jake me hacía sentir mejor, de cierto modo.

Cada vez estábamos más cerca de terminarlas, parecía que aquel vacío en mi pecho, cuando estaba con Jacob, parecía haber sanado, un poco.

Pero ni Jake puede llenar el vacío por completo.

Charlie me había dicho que estar con Jake parecía haberme tranquilizado, por un tiempo.

Y que algunas veces tenía que amar lo que es bueno para mi.